Lazos. [FumaKen] [SouRius] [ShoKao]

Dommo! Dommo! Dommo!! ¿Cómo han estado? La verdad es que esta historia ya tiene algo de tiempo. Pero la verdad es que me gusta escribir sobre parejas de Sexy Zone. Sobre todas las combinaciones posibles! >.< Lo malo, es que siempre hay uno que queda solo! Al ser impares! >.<
Espero que les guste! ^^

Lazos.

Pareja: [Nakajima Kento & Kikuchi Fuma] [Matsushima Sou & Marius Yo] [Sato Shori & Kuramoto Kaoru]

Género: Shounen-ai

Extensión: Mini-serial.

Nota: La verdad es que hacer fics sobre esta pareja es algo complicado, porque siempre hay uno que se queda solo. Pero yo lo he arreglado añadiendo a Kaoru, que Shori y él me hacen muy buena pareja. Espero que les guste! ^^

Autora: Mimi-chan

Capítulo Uno.

- Aaaah. - suspiró cansado Kikuchi echándose en la cama. Estaban en la habitación de Kento, aún seguían en el hotel, pues estaban haciendo el SUMMARY. - Que cansancio. - se quejó mientras cerraba los ojos disfrutando de la comodidad de la blanda cama. Nakajima que había entrado en el baño particular de la habitación salió con una toalla entre las manos.

- Fuma, no te vallas a dormir. Sabes que no puedo cargarte para llevarte a tu habitación. - se quejó el mayor. No era la primera vez que Fuma se dormía y entre los cuatro miembros le tenían que llevar, realmente pesaba mucho ese chico.

- Vale, vale. - contestó cansado de que siempre le repitiese lo mismo. - Siempre dices lo mismo. - dijo algo malhumorado mirándole de reojo. La verdad es que la cama de Kento le parecía más cómoda que la suya, también la habitación más cálida, Kento siempre tenía buen ojo escogiendo habitaciones. 

- Porque siempre te duermes. - se volvió a quejar Kento entrando en el baño para colgar la toalla donde correspondía. - Fuma, como te duermas, no te pienso llevar. - informó el mayor mientras se miraba en el espejo. - Realmente tengo la cara de un adulto... - susurró mientras se miraba fijamente. 

- Es que tu habitación es más cálida. - explicó Fuma el motivo por el que siempre se quedaba dormido en su habitación. Kento salió del baño apagando la luz del baño. Miró con una ceja levantada al menor que seguía tumbado en su cama.

- Que excusa más mala. - dijo algo burlón.  - Lo que pasa es que no puedes dormir solo. - Fuma pudo percibir cierto tono de burla en la voz de Kento. Se irguió, quedando sentado en la cama. Kento estaba apoyado en la pared, con los brazos cruzados y con una sonrisa socarrona en el rostro. Fuma le miró fijamente, y Nakajima le aguantó la mirada. 

- ¿Qué estás tratando de decir? - preguntó retando-le con la mirada. Kento sonrió, estaba consiguiendo lo que quería, que Fuma se alterase y así no se quedase durmiendo en su habitación. Aunque no le molestaba que durmiese en su habitación, más de una vez había tratado de dormir con él, pero era imposible, se movía mucho y ocupaba toda la cama. Entonces, había decido no dormir con él más.

- No estoy tratando de decir nada, lo estoy diciendo claramente. - siguió picoteando Kento. Sabía que Kikuchi podía acabar enfadándose de verdad, pero seguramente que para mañana se le pasaba. Aunque no quería que se enfadase, cuando se enfadaba su mal humor era temible.

- ¡Ya estamos aquí! - exclamó enérgico Marius que acababa de entrar por la puerta sonriendo radiantemente. Detrás de él entraron los dos miembros restantes: Shori y Matsu. Inconscientemente interrumpieron el duelo de miradas que ambos mayores tenían.

- Era hora de que llegaseis. - regañó Kento que fue el primero en apartar la mirada, tal parecía que Fuma se había tomado muy mal ese comentario. Él no quería acabar a mal con Fuma, pues era uno de sus mejores amigos, pero realmente no podía compartir cama con él. Ocupaba demasiado espacio, y tampoco podía ir a la habitación del menor porque no sabía dónde guardaba la tarjeta que abría la puerta. Entonces , era normal que no quisiese que se quedase en su cuarto.

-¡Menos mal que solo queda un día! - exclamó algo cansado Matsu, le gustaba actuar y cantar, pues siempre había sido su sueño. Pero no sabía lo agotador que podía llegar a ser esa profesión. Y también el apoyo y el cariño de las fans ayudaba bastante.

- Bueno, aún no cantes victoria. Todavía nos quedan los conciertos del Johnny's World. Y después tenemos los conciertos de año nuevo. - explicó Fuma algo malhumorado, los demás miembros notaron el malhumor que tenía así que les entró curiosidad.

- Oye Fuma, ¿te pasa algo? - preguntó algo preocupado Shori. En ese año que llevaban conformando el grupo había cogido mucho cariño a los miembros. Aunque todavía no se podía decir que pudiesen llegar a ser amigos cercanos. Aunque seguramente que Kento y Fuma se llevaban el doble de bien que el resto.

- ¿A mi? Nada. - contestó dejándose caer, nuevamente, en la cama de Kento. “pues ahora me voy a dormir, solamente para molestar a Kento”. Pensaba Kikuchi mientras miraba al techo. 

No sabía que tenía esa habitación pero le llamaba, le incitaba a ir ahí y tirarse en la cama para dormir. Realmente le había sucedido eso desde la primera noche, era una atracción algo extraña. Pues su habitación era completamente igual a la de Nakajima, pero prefería estar en la de Kento antes que en la suya. Aunque no necesariamente tenía que estar Kento para que él estuviese en la habitación. 

- ¿Seguro? Te noto algo enfadado. ¿Ha pasado algo? - preguntó preocupado Matsu. Quería mucho a Fuma, aunque también sabía que podía llegar a ser muy borde cuando se lo proponía. Y, a veces, incluso daba miedo. Pero Kento era al único que conseguía calmarlo.

- Segurísimo. - escueto contestó. Si le seguían haciendo esas estúpidas preguntas acabaría por contestarles mal y no quería eso, pues ellos no tenían la culpa de nada. La culpa, más bien, era de Kento. Rodó su mirada hasta posarla en el susodicho y le vio reírse alegremente junto con Marius. Ambos se llevaban bien, muy bien a decir verdad. Y todo porque el pequeño admiraba a Kento. - Tsk. - chasqueó la lengua en señal de molestia. Kento realmente conseguía sacarle de sus casillas. 

Todos siguieron comentando cosas sobre el SUMMARY la cantidad de fans que habían ido, la cantidad de sitios que habían visitado, la cantidad de bailes que se sabían. Hablaron del álbum, de sus senpais... de todo un poco. Fuma no prestaba atención a lo que los miembros decían, porque seguramente que no decían nada importante. Esas charlas eran las mismas cada noche, solamente que cambiándole algunos pequeños detalles. 

Volvió a rodar su mirada a la cara de cada miembro. Los veía reír y hacer payasadas como siempre. Shori y Sou estaban pegándose y Kento y Marius... abrió los ojos de sobre-manera. ¡Marius estaba sentado en el regazo de Kento! ¡¿Cómo podía ser eso posible?! ¿A ese punto había llegado la amistad? Bueno, Marius era muy kawaii cuando quería, pero Kento nunca haría ese tipo de cosas con un miembro, nunca lo había echo con él. ¿Por qué lo iría a hacer con Marius?

Su malhumor estaba volviendo a una velocidad vertiginosa, esa imagen se le había quedado clavada en la retina como fuego al rojo vivo. ¿Qué? No entendía nada. ¿Por qué le molestaba tanto que Marius se sentase en el regazo de Kento? Bueno, no solo le molestaba eso, sino la cara de felicidad que tenían ambos. Parecían una pareja de tortolitos. 

- Tsk. - volvió a chasquear la lengua, llamando la atención de Marius, que no había perdido de vista a Fuma en todo lo que llevaban de charla. Marius sonreía alegremente, pues Kikuchi siempre se molestaba cuando se acercaba a Kento y eso le gustaba. Pues Fuma siempre le estaba molestando a él, así que aprovechaba siempre que podía para estar cerca de Nakajima y molestar a Fuma. Aunque también le gustaba estar cerca de Kento, pues era comprensivo y siempre escuchaba lo que tenía que decir, sea lo que fuese, Kento siempre le escuchaba. 

- ¿Pasa algo, Fuma-kun? - preguntó con algo de malicia el pequeño del grupo. Así captó la atención del resto que se giró a mirar al malhumorado de Fuma. Este rodó la mirada posando-la en cada uno de los rostros de sus compañeros. Suspiró al ver que estaban preocupados por él. 

- Déjame en paz, niñato. - exclamó malhumorado. Le mosqueaba que entre todos los miembros, tuviese que ser él el que le preguntase cómo se encontraba. No podía ser otro, no, tenía que ser Marius. Los demás abrieron los ojos al escuchar lo que Fuma había dicho. 

El susodicho se levantó para dirigirse a la puerta, y sin ni si quiera despedirse salió cerrando la puerta fuertemente. Sorprendiendo aún más a los cuatro que quedaban en la habitación. Se miraron entre ellos, y por último miraron a Marius, que había puesto una mirada de tristeza al escuchar salir eso de la boca de Fuma. A Marius le afectaba mucho que se metiesen con él. Kento, que estaba sentado detrás de él percibió el cambio de humor en el pequeño. 

Se levantó y salió de la habitación para hablar con Kikuchi. Nakajima no entendía el cambio repentino de humor en Fuma, sabía que el comentario le había ofendido, pero no tenía que pagarlo con el pobre Marius que no había echo nada. Le diría unas cuantas cosas a Fuma. Por suerte logró llegar a tiempo, antes de que Kikuchi pudiese cerrar la puerta del todo. Puso un pie impidiendo que esta se cerrase.

- ¡Oye! ¿Por qué le dices eso a Marius? - le señaló con el dedo una vez que hubo entrado y arrimado la puerta tras él. Fuma se giró sorprendido, no esperaba encontrar a nadie en su habitación y menos a Nakajima. Arrugó el ceño mientras miraba al mayor. Fuma optó por lo contestarle y dirigirse hacia su maleta para sacar su pijama y ponérselo. Estaba cansado y lo único que quería era dormir. - ¡Te he echo una pregunta! ¡Así que responde! - ordenó el mayor acercándose algo molesto hacia el menor. - ¡Vete ahora mismo y discúlpate! - volvió a ordenar Kento.

- Me da igual lo que me digas, no pienso disculparme. - respondió tranquilamente Fuma mientras se quitaba la chaqueta y la guardaba ordenadamente en la maleta de viaje. Kento abrió los ojos sorprendido, pero ¿qué le pasaba ahora con Marius? Siempre se habían llevado bien ellos dos.

- ¿Y eso por qué? - preguntó malhumorado Kento. Le molestaba que tratase así a cualquiera de los miembros, y más si era Marius, que le había cogido mucho aprecio.

- Pues porque no quiero. - respondió tranquilo, poniéndose la parte de arriba del pijama. Kento se estaba empezando a sentir algo incómodo pues estaba invadiendo la intimidad de Kikuchi, y ante todo estaba la privacidad. 

- Oh, por favor. Tienes 17 años, no te comportes como un crío. ¿Te parece normal tratar así a un niño de 12 años? - le preguntó algo incrédulo y con sorna en el tono de voz. No se creía lo que estaba viendo, Kikuchi siempre le había parecido un chico maduro y tierno. No un chico quisquilloso y abusón. 

- Entonces. - se giró para encarar al mayor que le aguantaba la mirada severamente. - ¿Debería cogerlo y sentarlo en mi regazo? ¿Al estilo Papa Noel? - preguntó burlón Kikuchi. La verdad que esa situación no le desagradaba, pues Kento había dejado de lado a Marius para ir con él. Kento le miró extrañado no sabía a qué se refería Fuma. - Quiero decir, así es como tratas tú a un niño de 12 años, ¿no? - preguntó burlón Kikuchi.

- Cada uno tiene su forma de tratar a los niños. Yo los trato gentilmente y tú como un salvaje. - su enfado iba en aumento. No sabía por qué Fuma se estaba comportando así, ese comportamiento no tenía ni pies ni cabeza. 

- Y tan gentilmente. Casi parecéis una pareja. - susurró escupiendo cada palabra, no le gustaba el sentimiento amargo que estaba sintiendo. De verdad que lo odiaba, y a causa de ese sentimiento estaba tratando mal a Kento. - Me dais asco. - le susurró cerca de la cara a Kento, estaba enfadado por la forma en que Kento trataba a Marius. Nakajima abrió los ojos sorprendido.

¿Qué acababa de decir? ¿Qué le daba asco? ¿Él le daba asco a Kikuchi? Bajó el rostro entristecido, eso era lo peor que te podían decir, darle asco a una persona y para encima que te lo diga. Sus ojos se estaban haciendo agua, no soportaba el dolor de su corazón. ¿Por qué le dolía el pecho? Su corazón se comprimía y le dificultaba la respiración. Pero no, no se varía vulnerable delante de Fuma. Tragó saliva fuertemente y sin levantar la mirada dijo.

- Tranquilo, que no me voy a acercar a ti más. No valla ser que vomites. Siento haberte molestado. - susurró lo suficientemente alto para que el menor le escuchase. Fuma abrió los ojos con un dolor enorme en el pecho. Realmente le dolía el pecho, en el susurro pudo sentir como Kento estaba llorando. Sabía que había ido demasiado lejos, y se hubiese disculpado si no hubiese sido porque no le dio tiempo. Kento había marchado antes de que se diese cuenta.

Los demás miembros presenciaron la escena desde la puerta de la  habitación de Kikuchi. Los tres tenían los ojos abiertos, pues habían escuchado toda la conversación. No se creían lo que acababan de escuchar. Marius se sentía algo culpable, pues que Kento saliese lastimado había sido culpa suya. Pero sonrió levemente al notar el cambio en el humor de Kikuchi.

- Fuma-kun. ¿Será que estás celoso de mí y de Kento-kun? - preguntó sonriendo débilmente y mirando fijamente al nombrado que había alzado la mirada sorprendido de lo que el medio alemán había dicho.

¿Qué celoso? ¿De Kento y Marius? 

*FIN CAP.1*

Como he dicho va a ser un mini-serial, así que la historia tiene que concurrir rápida! xD

Espero de verdad que le den una oportunidad al fic! ^^